Arriésgate a ser feliz

Arriésgate a ser feliz

Cuántas veces nos han contado eso de que: <<la vida es como es>>, que <<esto es lo que hay>>, <<que no se le puede pedir más, porque es lo que nos ha tocado>>,…

Sin embargo no siempre lo hemos vivido así,  recordad cuando éramos niños, sentíamos que podíamos hacer todo lo que quisiéramos, y que nuestros padres podían conseguir cualquier cosa que nosotros pidiésemos,… conducíamos nuestra vida, incluso a veces la de los demás, nuestros padres corrían detrás de nosotros para que no cayésemos, nos mimaban, nos protegían, nos daban todo lo que necesitábamos sin pedirlo, nosotros solo nos ocupábamos de ser nosotros mismos y estar felices, nosotros elegíamos, éramos libres para crear la realidad que quisiéramos, cuando quisiéramos,… pero a medida que fuimos creciendo y recibimos ”educación”, empezamos a asimilar “la realidad” como algo externo, nos enseñaron que la vida que teníamos no se elegía te tocaba, en forma de suerte, nos enseñaron que todo sucedía sin que pudiéramos hacer nada para remediarlo, porque no dependía de nosotros, nos enseñaron a elegir bajo las restricciones de la sociedad.

Hasta el punto en que ahora nos cuesta creer lo contrario,… Nos hemos acostumbrado a que nuestros padres, profesores, familiares, amigos,… nuestra comunidad, nos guie y nos diga que es lo apropiado en cada momento que cuando estos se quedan sin respuestas nosotros nos quedamos sin guión.

“Cuando conocimos todas las respuestas, la vida nos cambia las preguntas”

Porque nuestros padres, amigos, profesores,… la sociedad, no pensaron en que las cosas cambian y el ser humano evoluciona, y cuando eso ocurre, no sirve el modo de actuar antiguo, hay que crear uno nuevo, ¿Pero como?¿Nadie nos enseño a que podíamos pensar por nosotros mismos?

Pero podemos, siempre hemos podido, solo tienes que elegir:

    Avanzar, adelantarse y arriesgarse a equivocarse, buscando a favor de mis valores, de mis talentos, creando la realidad que yo deseo.

    Esperar a que otros encuentren las respuestas a las nuevas preguntas, y seguir viviendo la realidad según la entienden los demás.

Es un gran momento de oportunidad, la vida nos ofrece la oportunidad de crear la realidad que nosotros queremos. Nos sentimos perdidos, porque no tenemos las nuevas respuestas, pero debemos abrir los ojos y ver el mundo de posibilidades nuevas que se dan a nuestro alrededor.

Arriésgate a encontrarte de nuevo, busca ese niño que hay en ti, ese niño que nada temía, que era libre, que decidía su propio camino, encuentra al adolescente que luchó hasta el final de sus fuerzas para que ese niño no le abandonase, y convence a tu ser adulto para que se despoje de tantos personajes y no tenga miedo a mostrarse tal y como es.

Arriésgate a crear tu realidad, arriésgate a tomar las riendas de tu vida a pesar del miedo, arriésgate a ser feliz.

Deje su comentario